¿Dónde van a morir los elefantes?

Subcomisario Cristian González Barría

Existe una leyenda de remoto origen, que da cuenta de una conducta adoptada por los elefantes de la sabana africana; quienes llegados a una avanzada edad buscan un lugar ya reconocido y aprobado por todos donde descansarán para siempre. Hermosa reflexión escrita por un reconocido profesor de una pequeña comuna, situada al sur de Temuco.

En efecto en esa historia que llevaba por título “¿Dónde van a morir los elefantes?”, el maestro hace alusión a la sociedad que envejece día a día y de forma acelerada, sin tener la capacidad de reconocer a los viejos, de empatizar con el necesitado, de apoyarse y trabajar en sana comunión. Pareciera que los días son más cortos y faltasen horas del día para hacer un sinfín de actividades. De verdad que corremos por la vida sin mirar a nuestro alrededor. Y eso que en estas tierras y lo aprendí muy bien, el que se apura pierde el tiempo, pero aún aquí ese estilo de vida se está perdiendo.

Es lamentable que disipe la capacidad de asombro por el rápido vivir; es lamentable que nos importe poco lo que pase en nuestra ciudad, en nuestros trabajos, en el colegio, en nuestro barrio, y que esta indiferencia con olor a egoísmo y desprendimiento de sociedad no lleve a “correr” solos por la vida; a pesar de estar rodeados de “amigos y contactos virtuales”, lo que sin duda nos hace más débiles y vulnerables ante cualquier necesidad.

Es esta la reflexión que, como servidores públicos, garantes de la ley, como Detectives, como hombres y mujeres de bien queremos impregnar en vuestras conciencias. Así como los elefantes buscan un lugar apacible para su eterno descanso, de igual forma trabajemos juntos en pos de ese ideal, que ganemos espacios públicos, que como vecinos exista voluntad de trabajar por las necesidades de todos, que en los colegios nuestros hijos asistan para complementar conceptos del buen vivir ya aprendidos en casa, que en los trabajos, por muy distintos y variados que estos sean exista constante respeto hacia los deberes y derechos de todos. Y tal vez, así nos encontremos en ese lugar de apacibilidad y descanso que en esta acelerada sociedad todos buscamos.

¡Ah a propósito!, ese maestro de quien hago recuerdo en esta columna fue mi padre, me había olvidado en mencionarlo; tal vez porque mi teléfono suena y alguien me escribe un mensaje de texto…y ahí estamos de nuevo, corriendo por la vida. Es difícil darse el tiempo, pero de que vale la pena sin duda lo es.

Subcomisario Cristian González Barría Jefe Subrogante Brigada de Investigación Criminal  Coyhaique.

Cristian González es hijo de Loncoche de un matrimonio de Profesores. Tuvo una heroica actuación en el terremoto de 2010 cuando se desempeñaba en Constitución.  

 

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