Frase del día: "Tratad a los demás como queréis que ellos os traten" Mateo 7,16. 12-14

¿Me perdonas, Papá?

By on 27 diciembre, 2022

Por Belto Alarcón Seguel

Desde niño me sentí atraído por el fútbol y la política y fueron, sin duda, heredadas de mi papá, Manuel Alarcón Nourdin, el que fue recordado hace ya algunos años por el profesor Francisco Méndez como “incansable dirigente, Alcalde y actor social”.

Mi atracción por la política me llevó, luego de pertenecer a la Juventud Socialista, a ingresar al Movimiento de Izquierda Revolucionaria -MIR-, del cual llegué a ser miembro del Comité Regional Cautín-Malleco,  incorporarme al dispositivo de seguridad del Presidente Allende y posteriormente pertenecer a la estructura de ayudantes de la Comisión Política del MIR. El golpe cívico-militar del 11 de septiembre de 1973, me sorprendió cuando cumplía tareas especiales en la provincia de Malleco. Tres semanas más tarde, fui detenido por personal de Investigaciones en Temuco, gracias al dato que entregó Armando Jaramillo, ex compañero de curso en la escuela primaria en Loncoche y chofer de esa institución policial. Condenado a 8 años de prisión por un Consejo de Guerra –que hace algún tiempo la Corte Suprema de Justicia invalidó la sentencia, declarando a todos los condenados inocentes de los cargos que nos imputaron los militares y el fiscal militar Alfonso Podlech Michaud, actualmente condenado en primera instancia por crímenes de lesa humanidad- me acogí al Decreto 504 que permitía conmutar el resto de la condena por extrañamiento (exilio). Así el septiembre de 1975, después de dos años de cárcel llegué a Francia y algunos meses más tarde me reunía con mis hermanos Ximena y Bincho en Ámsterdam, radicándome con Patty en forma definitiva en los Países Bajos.

Mi relación con el fútbol la llevo desde muy pequeño hasta tal punto que para aprender a andar debí usar chuteadores de fútbol como zapatos, en caso contrario me caía de inmediato, eran los toperoles los que me mantenían erguido. Esto me lo contaron en innumerables oportunidades mis padres.

Jugué centenas, miles de pinchangas en Loncoche, tanto en lo que conocíamos como la cancha de los pacos -hoy Población Los Trigales- y en la cancha del bajo –terreno donde se ubica hoy el Liceo Padre Hurtado, y en el estadio Municipal, ubicado en las cercanías de la Población Manuel Alarcón, de la que papá estaba orgulloso porque fueron los pobladores beneficiados con sitios cuando él fuera gobernador el 1957 los que decidieron que llevara su nombre.

Fuimos juntos a innumerables partidos en Loncoche, Temuco y en una oportunidad a ver al Ajax de Ámsterdam cuando junto con mamá estuvo con nosotros en los Países Bajos. Vimos al mismo momento, pero separados por miles de kilómetros torneos internacionales, él en Temuco, yo en Ámsterdam, Den Bosch o Diemen. El fútbol siempre estuvo presente en nuestros contactos y fue uno de los temas en cada carta que les escribí en mis primeros años de exilio.

Hijo de emigrante francesa muy pobre, papá no ocultó en esos momentos deportivos su vínculo con Les Bleus, escuchaba con emoción La Marseillaise y yo compartía su preferencia, así me parecía sentirme cerca de la abuela Louise, quien falleciera a muy temprana edad lo que impidió conocerla. Él estaba a favor de Les Bleus franceses y yo también. Siempre, hasta este domingo 18 de diciembre en que se jugó la final del mundial en Qatar. En esa oportunidad fui partidario de Argentina porque pensé en las valerosas Madres de la Plaza de Mayo, hoy día las Abuelas, y su lucha permanente, a pesar de los años, por encontrar a sus nieto(a)s que fueron robados apenas nacieron de sus madres que estaban prisioneras en centros clandestinos de tortura y exterminio; por la entereza que tuvo entonces la justicia argentina para procesar y condenar a los integrantes de la Juntas Militares (Videla, Massera, Agosti, Viola, Lambruschini) siendo la primera condena al terrorismo de Estado en América Latina. Y porque ahí estaba Lionel Messi, el mejor jugador de la historia, criado y formado en el Barça, quien junto a otros de sus compañeros de selección por segunda vez se pusieron al servicio de la lucha de las Abuelas. En 2014 posaron con carteles y con un lienzo con la frase: “Hace 10 mundiales que te estamos buscando”. Ahora, en marzo de 2022, Messi, De Paul, Paredes, Armani, Otamendi, Mac Allister, Molina y Tragiafico (junto con ellos estaban también  Nicolás González y Javier Correa, que no participaron en el mundial por encontrarse lesionados),  posaron junto a un lienzo con la frase: “24 de Marzo: Más Memoria, Más Verdad y Más Justicia”. El 24 de marzo se conoce hoy en Argentina como “Día Nacional de la Memoria por la Verdad y la Justicia”.

Por ello no pude compartir tu preferencia.

¿Me perdonas, Papá?

Belto (Luis Alberto Alarcón Seguel)

Diciembre 2022, Países Bajos

N del D: la foto de la nota es la Familia Alarcón Seguel

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